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martes, 7 de febrero de 2012

Todo termina aquí


Es la segunda vez que escribo esto, llevaba 2 planas, pero mi jodida madre hizo que se cortara la luz y me fregó toda la weá, que rabia e.é
Querida vale:
Me siento obligado a responder a tus hermosas palabras, quizás es un poco canalla de mi parte al mencionarte cosas como estas a través de letras graficadas, pero uno de mis grandes defectos es que odio las despedidas y algo tan sublime como el poder tomarte de la mano, mirarte a los ojos,  reír y decirte cuanto te quiero, llegaría a ser algo netamente tortuoso. Aun pienso y me da risa como comenzó toda esta historia, pienso en lo “cliché” –si es que así se escribe, y no creo-  que fue lo nuestro, el conocerte en el club de teatro y comentarle a la katty: “mira, es linda ella” mientras tu hablabas y brillaban tus frenillos, tiempo después éramos una extraña pareja, y meses luego eras la chica sexy que cegó la vista de un idiota impulsivo a la vida, te agradezco todo eso.
Pasamos muchas cosas juntos, recuerdas nuestro primer helado? – iba a ser café, pero hacia demasiado calor- éramos tu y yo en la banca de la plaza, haciendo nada, mirándonos y riendo, éramos lo más infantil del mundo y me encantaba eso. “Irías a ver la obra de la próxima semana con migo?” algo así creo que decía el mensaje, bueno no me exijas mucho, mi memoria es mala, siempre pensé que no llegarías ese día al aula magna, pero ahí estabas, y tengo que decirlo: estabas reluciente, te veías hermosa. Ahora puedo mencionar que la obra fue un asco, la acústica era pésima, y las luces mal proporcionadas, pero aun así la vimos hasta el final, junto al grupo de teatro e incluso la profe Karen que se deban vuelta a mirarnos a cada momento pensando que pasaban desapercibidos, y ahí nos miraban, o más bien, veían nuestras cabezas, levemente  inclinada una asía otra, durante ese rato pensé que te molestaba un poco la situación  y me incomodaba un poco, pero que puedo decir, eras pequeña, o más bien dicho, tímida, tímida y pequeña. Esa noche estaba nerviosísimo, luego que termino la obra, te abrasé y me despedí de ti, seguía nervioso, no estaba acostumbrado a dar tanto por alguien, la katty se dio cuenta de eso, y me acompaño a fumar frenéticamente a la plaza para analizar eso y los caguines de la semana.
Tu timidez siempre me fastidio un poco, bueno, antes. Eso de que muchas veces si yo no hablaba tu no lo hacías, me daba la impresión de que estabas incomoda, pero luego me di cuenta que en realidad eras así y me acostumbré a dejar de esperar que me golpearas, me mordieras, o me amarraras a una cama para ponerme será caliente en la espalda, pero en fin, con tus risitas ya es suficiente.
Siempre lo nuestro fue hermoso, o al menos eso pienso yo, fue lindo, fue suave, fue blanco, luminoso, e incluso chispeante, creo que era porque nos queríamos, y nos queríamos de verdad, no por “no estar solos” o simplemente por sexo, era porque disfrutábamos de estar juntos, podíamos hablar, mirarnos, reír, coquetearnos y hacer el ridículo para luego burlarnos a carcajadas de aquello, cosas ridículamente recordables y apreciables.
Nunca pensé que estarías con migo algún día, te veía demasiado perfecta, de echo, la sola imagen de una joven conservadoramente tranquila tomada de la mano con un desbordado y jugoso idiota que vestía raro, como que no me calzaba demasiado bien, pero al parecer funcionó, y hasta a los profes les agradaba la mezcla –eso es un poco perturbador pero cierto, no que les agrademos, sino que nos lo mencionen cuando nos ven que estamos juntos- y duramos bastante juntos, hiciste romper mi record –algo que mis queridísimos papitos suegros nunca sabrán-, un tiempo que no creo dejar de olvidar, un tiempo que reviviré cada vez que pase por la banca de la plaza a beber un café.
Siento que lo nuestro quedo un poco incompleto,  nos quedaron cosas sin vivir, por mi parte al menos, creo que aun no te he mordido lo suficiente, me falta aroma de tu cabello por olfatear, besos que darte, miradas que compartir, aun no te invito a beber café a un mirador, aun no salimos a bailar salsa, aun no despierto en la mañana contigo a mi lado, e incluso lo más importante, aun no ponemos un huevo juntos.
Recuerdas cuando tu madre nos vio en la plaza! O cuando llego tu abuela a la casa cuando te chocaron –algo que me asustó mucho, tu sabes que lo escuche de mis compañeros quienes son un poco mexicano, ya te veía postrada  y sin una pierna-, tu abuela que me saludo y yo me presenté con mi nombre descaradamente, o peor aun, ahora ultimo cuando salte sobre ti en la tienda aquella donde estabas con tu madre! Luego de salir de ahí explote entre risas y espasmos por la sorpresa, fue realmente chistoso.
Fuiste durante mucho tempo mi razón de quedar atrasado en las materias cuando dictaban, me dedicaba a sentarme en la ventana para observarte cuando podía, como lo hacia cuando estabas en ingles y yo en biología, durante mucho tiempo fuiste participe de bromas y chistes que me hacían mis amistades, e incluso fuiste parte de mis sueños –donde me daba el gusto de poder besarte, ya que recordemos que nunca quisiste compartir tus labios hasta que te pedí pololeo-, durante un tiempo, sentí que podía dañarte, sentí que podía hacer mal, incorporarte a dramas que no necesitabas, que no tenias para que llevar sobre tus hombros, siempre e sido bastante reservado con mis cosas, seguramente te has dado cuenta de eso, pero no me gusta hablar esas cosas, y menos hacer que otras personas se jodan el día por líos míos, quizás fui un poco inconsecuente en ese sentido, al decir que confiaba en ti, y no hablarte de mi vida, pero, mi inconsciente me ganaba, algún día te contare muchas cosas, y podre decir que eres una amiga, y quizás luego te haga beber alcohol y diré que eres mi amiga y más que eso.
Recuerdas cuando me mencionaste que cumplirías 15? Eso me dolió, fue un golpe bajo, todo paso a ser de cartón y papel mojado, me entraron muchas dudas, no sabia si realmente me querías o era un fetiche de una niña, no sabia si realmente me habías dicho que sí querías estar de pareja con migo porque lo habías analizado, o porque eras influenciable –yo me considero influyente- y te habías dejado llevar, y más aun me dolió por lo que habíamos hecho, porque me había dado el placer de hundir mi rostro en tu pelo, y besar esa parte cerca de tu boca del estomago que no es muy fácil de alcanzar –a todo esto, aquella instancia no fue perfecta, pero fue hermosa, o almeno para mi, que estaba consiente de aquello, no sé como estabas tú, solo sé que estabas sonrojada y un poco ida-, con el tiempo, lo acepté, y sí, me dedique a analizarte, lo acepto, y vale decir que me sorprendí al llegar a mis propias conclusiones, claramente eres una niña, tu cuerpo aun no es de mujer, pero tu mente, va muy sobre tu edad, no siempre es bueno, pero para tener 15, vas sobre otras personas –un ejemplo: pancho el alcohólico-, ahora veo porque nos complementamos tan bien, mi mente infantil a mi edad, y tu mente adulta a tu edad, se juntan en el mismo limite de desarrollo, nos complementamos.
Permíteme decir que tu sonrisa es hermosa, y el año pasado también lo era, tu rostro es delicado –incluso tu narizota que me dedico a fastidiar, pero no sé que haría si no la tuvieses, me encanta mordisquearla y te queda muy bien-, tu pelo es mi debilidad, tu rasguño de la cadera es algo que me mata, lo encuentro sexy y rudo –cosas mías que ni yo entiendo-, tu boca es delgada, comparable con un pince, y hace suaves obras de arte sobre mis labios, tu cuello, tus piernas, tus uñas grrr, eres fabulosa, fácilmente podrías ser modelo, ya te pareces a Celine Reymond, o a la niña del cartel de coca-cola, la de polera roja –como la que tienes que se marcó tanto en mi memoria-, en fin, te quedo claro que me gustas bastante, no?.
El tiempo que nos separamos te extrañe mucho, bastante, viví cosas feas, y me di cuenta que realmente eras de las pocas personas que me quería y que siempre estaría ahí para abrazarme cuando lo necesitara, muchas veces me paraba en el umbral de la puerta de mi sala a buscarte, para ver si podía encontrar tu mirada, solo para recordar lo que se sentía, mucho me preguntaban si quería lucirme para ti, pero en realidad solo pensaba que no me molestaría dar un poco de pena y correr a pedirte disculpa por haberte preparado para romper contigo a través de chat y mensaje, y que quería que me tomaras del brazo de nuevo. Aquella vez, lo lamenté, y a pesar de mi orgullo que tanto me hace peso, la cagé, y fui un idiota, nunca tuve que haberme alejado de ti, pero en fin, al tiempo, tú y tu mente –que no sé como lo hizo, o quizás te pille despistada- acepto  darme otro chance, y bese tus labios nuevamente, y hasta lo saboree durante todo el día, gracias.
Aliena, amor, querida, madame bovary, valery, sin duda, fuiste mi mejor historia, mis mejores momentos, ni siquiera mis amistades quienes supuestamente deberían hacerme feliz, llegaron a esa parte de mi que llegaste tu, de manera rápida, sin problemas, de echo, nunca tuvimos problemas, o al menos nunca percibí alguna mala señal, quizás un poco de celos de mi parte, o un poco tenso cuando despertaba de mal humor, pero siempre por alguna frikidad mía, nunca porque realmente tuviéramos problemas, eso es bueno.
Querida vale, te quiero, te quise y te querré siempre, recuerda que cada vez que quieras estaré para ti, eres única, recuerda que siempre tienes que ser la mejor, y mereces lo mejor, y no te involucres con gente toxica, o inculta, o flaites o huasos, yo te quiero ver en una mansión en Europa algún día, tu puedes hacerlo, yo me di cuenta de eso, puedes ser grande muy grande y llegar muy lejos, ahora es cuando digo adiós, o más bien un hasta pronto, no porque quiera, sino porque ya son las 4 de la mañana y mi madre pide a gritos que apague las luces, en fin, en pocas palabras: TE QUIERO AMOR MIO. (Y no de manera teórica <3)








To: V.G

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Años sin leer esto...

Marcoholic dijo...

Ni yo :/ :c <3

Marcoholic dijo...

Ni yo :/ :c <3